Actividades
El proyecto está estructurado en seis actividades principales:
A1 - Elaboración de las prioridades de conservación y selección de las especies objetivo en cada Isla
Durante esta primera fase los socios cooperarán usando criterios comunes para la priorización de las acciones de conservación y para la selección de las especies de plantas que se incluirán en el proyecto. La selección de especies se basará básicamente en los criterios de responsabilidad regional y el nivel de amenaza (sensu IUCN, Listas Rojas). También se tendrá en cuenta la inclusión en los Anexos de la Directiva Hábitats y/o en la regulación nacional o local. Las plantas de humedales tendrán un enfoque particular y serán seleccionadas para las acciones de conservación. De acuerdo con el criterio de responsabilidad regional, se dará prioridad a las plantas endémicas o a aquellas que merezcan un interés conservacionista especial para la isla (ej: poblaciones periféricas o aisladas). Los resultados de esta fase serán un conjunto de criterios comunes utilizados para las prioridades de conservación y una lista dinámica de las especies vegetales seleccionadas para cada isla.
A2 - Planificación de las actividades in situ y ex situ
Posteriormente a la selección de las especies, se identificarán aquellas poblaciones vegetales que requieran medidas urgentes de conservación in situ (ej.: gestión, erradicación de especies invasoras, cercados, translocaciones) y aquellas donde deberá realizarse recolección de semillas para su uso y para la conservación de germoplasma. Cabe destacar que, en los casos de las especies objetivo seleccionadas para realizar acciones de conservación in situ, las estructuras de propagación (semillas) pueden provenir de semillas recolectadas en anteriores proyectos y en especial en el proyecto “Asegurando la supervivencia de plantas amenazadas en islas del Mediterráneo” y que hayan sido conservadas en los bancos de semillas de los socios colaboradores.
A3 - Acciones de conservación in situ
Estas acciones incluyen medidas de conservación in situ pensadas para mejorar el estado de conservación de las especies o poblaciones seleccionadas. El método preferente serán las translocaciones (incluyendo reintroducciones y/o refuerzos poblacionales). De manera adicional o alternativa, se incluirán otras medidas de defensa pasiva (ej.: cercado de las poblaciones para protegerlas del ganado) o medidas como la erradicación de plantas invasoras o el control de plagas vegetales, la plantación de vegetación autóctona dentro o en los alrededores del área de la población, y la reconexión de los reductos aislados.
Las translocaciones de las especies vegetales seleccionadas se realizarán tras haber realizado estudios preliminares de la distribución histórica y actual de la especie y de la disponibilidad de sitios, para asegurar que la reintroducción o recuperación sea posible y factible. Además, se estudiarán cuidadosamente los ciclos vitales, la biología reproductiva, la biología poblacional y los requerimientos ecológicos particulares de las especies o grupos vegetales seleccionados. Se realizará un cultivo preliminar ex situ de las plantas seleccionadas para los planes de recuperación en cada uno de los jardines botánicos o instituciones colaboradoras del proyecto.
Se creará un plan piloto de translocación para cada una de las especies objetivo teniendo en cuenta las directrices de la IUCN/SSC (2013). Se abordará de manera similar la planificación de las acciones pasivas y otras medidas de gestión. Las translocaciones serán supervisadas regularmente con el fin de verificar si se cumplen los objetivos establecidos y en qué grado lo hacen.
Las acciones de conservación in situ se realizarán para un mínimo de 30 especies objetivo (mínimo 5 plantas por isla y la realización de un mínimo de 10 acciones).
Todas las acciones anteriormente mencionadas se realizarán en colaboración con las autoridades relevantes de cada isla y con los responsables de gestión de las áreas naturales; además, se involucrará activamente a las autoridades locales en las acciones in situ y en los programas de supervisión.
A4 - Acciones de conservación ex situ
Se realizará recolección, tratamiento y almacenaje de semillas / frutos de las especies objetivo seleccionadas para la conservación de germoplasma. La colección de germoplasma y el tratamiento para la conservación se realizaran para aquellas especies y poblaciones seleccionadas siguiendo la regulación y los estándares nacionales e internacionales (como aquellos desarrollados por las redes internacionales de GENMEDA y ENSCONET). Para realizar la recolección de germoplasma se seguirán criterios que maximicen la representación de la diversidad genética de las poblaciones de cada isla. Con tal de conseguir este objetivo, la recolección de un mismo taxón se realizará en más de una población y se tendrá en cuenta la presencia de un taxón en dos o más islas para su correcto muestreo.
Las acciones ex situ representarán un total de 600 accesiones para 120 taxones objetivo (un mínimo de 100 accesiones para 20 taxones por cada isla). Como medida preventiva y con el objetivo de asegurar la conservación del germoplasma recolectado, se duplicarán las accesiones en los bancos de semillas de otros colaboradores del proyecto o, si es apropiado, en otras instituciones.
La información de la ecofisiología germinativa del germoplasma recolectado se obtendrá mediante la realización de pruebas de germinación. La selección de las especies examinadas se realizará en base a la abundancia de semillas por accesión. En consecuencia, solo se realizarán pruebas de germinación para aquellas especies cuya distribución permita la recolección de una cantidad de semillas adecuada para realizar tanto la conservación ex situ como las pruebas de germinación.
Además de la conservación ex situ de semillas para las colecciones a largo plazo, cada institución asegurará la disponibilidad de plantas para usar en los planes de recuperación. Parte de la colección de semillas será usada en la “colección activa de semillas” para la producción de plantas. En los casos de plantas perennes en peligro extremo, una colección de esquejes podría ser útil para mantener una copia ex situ de la población silvestre. El mantenimiento de una colección de planta viva en los jardines de los respectivos socios permitirá su uso en los programas de recuperación, además de poder ser usada para la difusión de los resultados del proyecto y para la educación ambiental.
Además, los colaboradores del proyecto realizarán salidas de campo conjuntas cubriendo la totalidad de la época de recolección y todas las islas con tal de compartir el conocimiento y las soluciones a los posibles problemas.
A5 - Redes de contacto y comunicación
El establecimiento de una red contacto entre los colaboradores del Proyecto, las instituciones y autoridades locales de cada isla, las iniciativas internacionales relacionadas y los proyectos a nivel del Mediterráneo se considera una prioridad y tiene como objetivo mejorar la colaboración y efectividad de la conservación vegetal. Se realizarán acciones especiales destinadas a enriquecer la red ‘GENMEDA’ (Red de Centros de Conservación de Plantas Mediterráneas) y expandir sus actuales 13 miembros de 7 países con nuevos miembros de otras partes del Mediterráneo incluyendo países del Norte de África y el cercano Oriente.
La comunicación en sus múltiples formas incluirá la página web del proyecto, un panfleto y un informe Layman (informe divulgativo dirigido a las autoridades locales y al público general). Cada colaborador organizará como mínimo un evento a nivel local para difundir los objetivos del proyecto y los conceptos claves relacionados con la conservación de la flora autóctona. Estos eventos serán abiertos para la gente y las autoridades locales así como para cualquier persona que pueda tener interés en la materia. Los colaboradores del proyecto presentarán el proyecto en congresos científicos (tanto eventos nacionales como internacionales) y, antes de la finalización del proyecto, se realizará un congreso internacional dedicado a la presentación de los resultados.